Se dice que Ted Bundy mató al rededor de 100 mujeres; el payaso Pogo, John Wayne Gacy, violo, mato y enterro a unos 33 jóvenes. Estos asesinos en serie, al final eran humanos que debían comer, cuál fue la última cena de cada uno.
El fotógrafo Henry Hargreaves pidió la información oficial del día de la ejecución de varios asesinos en serie, recreó el plato y armó un proyecto fotográfico llamado “No Seconds”. Con esto busca: una forma de conocer un lado más humano de estos convictos.
En la serie, pone la charola de comida, la edad y una breve descripción del ejecutado. Así, Ricky Ray dejó medio pay de nuez y dijo que lo ”guardaría para después”; o el festín de camarones y pollo de John Wayne antes de recibir la inyección letal.
Fuente: BuzzFeed